domingo, 22 de mayo de 2016

Función autocompletar

Palabras en diferido en misión bélica. Balas de plata con el objetivo inscrito en anonimato. Casualidades causales de temblores, vértigo y diaforesis. Error de comunicación. Función autocompletar fallida. Pánico. Ansiedad.
Volver a empezar. Simular una sonrisa. Mensaje recibido. Apunten, disparen. Recuento de daños.
Tocado y hundido.

viernes, 6 de mayo de 2016

Encantada desconocerte

Tu error fue asumir que me conocías en el primer intercambio de pareceres. El mío, dejar que siguieras alimentado las confabulaciones, divertirme con tus suposiciones sobre quien soy. Hablas conmigo y contestas por mí. Construyes tu mundo de fantasía sin contar con nadie. Te miro desde fuera, intentando comprender porque digo cinco y escuchas diez. Pero, mira a tu alrededor, nadie a tu lado, nadie escuchando tus novelas de drama y ciencia ficción.
El telón se levanta  y yo… yo ya me voy. Sin bombas de humo, sin más trucos de magia, no le des más vueltas a esta historia de dos caras que nunca existió por ninguna de las dos.

jueves, 7 de abril de 2016

Mar de ciudad

Suenas como el mar embrutecido. Me hipnotizas con tus luces centelleantes, con tu no parar.
Eres liso y constante, camino de negro betún. Me atraes y me conquistas con tus guiños de cristal.
De prisas inconstantes. No descansas, no te cansas, ahora aceleras y ahora te frenas, te paras y te desvías, y vuelves a empezar.

Yo te observo desde arriba, inmóvil, abstraída. Te veo cruzar a la velocidad de la luz. Casi parece que fueras a rozar mis pies, que se balancean bajo el puente. Con la brisa que provocas se forman remolinos infinitos en el aire, y en ellos se enredan, uno a uno, mis pensamientos.
Pasas y pasas y nunca acabas de pasar. 

Y, cuando parece que te acercas, cambias de sentido. Enlazas rotonda con rotonda, pero nunca pierdes la dirección.

martes, 1 de marzo de 2016

Electricidad


Escucha el murmullo del tendido eléctrico: leve, inapreciable si no prestamos atención. Pero ahí está, continuo, imponente. Discreto y amenazante. Celosía de acero y hormigón.
Desde su altura se extiende, a 30 metros sobre la tierra, y forma la red que cubre ese incierto espacio entre el cielo y el suelo. Magia de alta tensión canalizada en cobre.
Desde ahí nos protege y previene de las mentes que podrían volar más allá.

viernes, 26 de febrero de 2016

Tarde de tormenta

Las nubes se deshacen en jirones de algodón.

Se tira el agua, kamikaze, en picado hacia los verdes mantos.

Mantos verdes, y otros de dorado trigo, que cubren la tierra inmensa.

La luz deja sus últimos haces reposar en el horizonte y bañan el paisaje.

Y entre tanto desasosiego, el arcoirirs enérgico les parte en dos.